03 julio 2008

Las nuevas no tan divinas

Cartón de Perujo


“La esencia del poder real que domina en la sociedad mexicana es el odio y el miedo a la juventud”.

José Revueltas (1968)


Es reconfortante saber que los "usos y costumbres" policíacos siguen vigentes después de tantos intentos necios para cambiarlos.

A pura vista siguen "ubicando" a los delincuentes, si tienen un tatuaje, un piercing o una vestimenta "atrevida" son pruebas irrefutables de su culpabilidad y ameritan ser llevados como ganado en autobuses de servicio público, pero no sentados, sino agachados, o tirados en el piso, recibiendo zapes de honestos policías a los que no podrán identificar porque se les obliga a mantener la vista baja, tampoco podrán cruzar palabras con los compañeros cercanos, mucho menos hablar a sus padres, amigos u otros familiares por teléfono celular, el cual probablemente y ya haya sido decomisado por los mismos servidores públicos para evitar que llamen al resto de la banda de delincuentes y puedan organizar una operación de rescate que les prive de la gloria de meter presos a tan siniestros personajes.
La llegada al ministerio público tendrá que demorar horas, ello ayudara a derrumbar las pocas defensas que puedan tener gentes tan peligrosas como unos adolescentes, a las mujeres las pasaran a revista médica, pero no para verificar que no las hayan golpeado en el trayecto, no, será solo para que "el doctor" las obligue a desnudarse, dar brincos (este método de diagnostico es exclusivo del legista, pero ello no impide que se asomen discretamente otros empleados o los mismos policías), pero no lo hace para evaluar síntomas de intoxicación (después de 5 horas y con el susto difícilmente alguien seguirá borracho o drogado, seguramente será para evaluar la firmeza de las carnes, mismas que serán fotografiadas (todo para efectos de control, no se piense que para guardar trofeos del heroico operativo), y como son tantas lo mejor será no confundirlas, para ello se les marcará con un plumón en el brazo.
Ya cumplidos los tramites de rigor se les pasará a barandilla, pero no a rendir declaración, solo para leerles los cargos, tomar de nueva cuenta sus datos (teléfonos incluidos, nunca se sabe si hay que llamar después a los familiares para "ofrecerles ayuda" para que el chámaco salga rápido y se eviten el ser fichados, ya se sabe que alguien con antecedentes penales tendrá problemas toda su vida, o bien, para hacerles atentas recomendaciones de cerrar el pico, si es que éstos se atreven a poner en duda los métodos científicos utilizados en el operativo).
El paso siguiente es meterlos en una celda húmeda, sucia y con gruesos barrotes, previó a esto se les despojará de cualquier cantidad de dinero que posean, no sea que se les ocurra comprarle drogas a los demás detenidos para seguir su fiesta.
Si alguno de los detenidos conserva todavía algún resabio de indignación se le segregará de los demás, se le dará una calentadita o se le podrá a limpiar los baños con la lengua, ello servirá para dos cosas, por un lado desactivará cualquier rebelión general y por el otro demostrará que esas payasadas de los derechos humanos y demás valen gorro. Allí solo hay una ley y ellos son los encargados de aplicarla.
Unas hora después se les invitará cordialmente a sentarse ante un escritorio donde un sonriente "agente" les planteará sus opciones: cárcel o cárcel, a menos claro ésta que en virtud de su buena disposición u apariencia puedan conseguir algún dinerito para conseguir que "el licenciado" les eche la mano y les de chance de salir sin registros de nada, para ello se le invitará a platicar con sus compañeros y entre todos agilizar el tramite.

Lo anterior no solo es la historia de los detenidos del News Divine, me ocurrió a mi a los 16 años cuando en compañía de unos compañeros de la vocacional salíamos de una fiesta enfrente de la refinería de Azcapotzalco, nuestro delito: ser jovenes y andar caminando a deshoras.

2 comentarios:

PEPMAC dijo...

No es necesario tener 16 años para que la tira te atore, pero si es requisito indispensable ser politico para gozar de la impunidad.

Saludos TriMAX, que buen posteo

Mario dijo...

Las vivencias de uno en su pubertad no son realmente diferentes de la actualidad, esa onda de andarse cuidando de los azules no es nada nuevo, la diferencia radica que ahora hay telefonos moviles, internuez y demas lindezas que permiten difundir informacion de manera rapida y sin cortapisas, en otras epocas lo unico que quedaba como consuelo de la madrina y taloneada que te dejaban los tecolotes era mentarles el 10 de mayo cada vez que podias.